sábado, 24 de diciembre de 2016

FELICITACIÓN… PARA EL EQUIPO DE GOBIERNO DE ÚBEDA

Valla del colegio Matemático Gallego Díaz

Nuestra felicitación es doble, para Navidad y Año Nuevo
y por el acierto en algunas obras acometidas

Para finalizar el año y previo a las fiestas que se aproximan, los “Caballeros Veinticuatro” quieren transmitir su felicitación a todos los ubetenses y cómo no, también a los políticos de turno, sobre todo a los que nos gobiernan. Y la felicitación para éstos últimos es doble, de una parte por la inminente Navidad y Año Nuevo, y de otra por algunas empresas que últimamente se han llevado a cabo (o se están llevando) con bastante acierto, al menos bajo nuestro punto de vista o criterio.
            Hace muy pocos meses vimos cómo se reconstruía buena parte del muro de la fachada principal del colegio Matemático Gallego Díaz que tenía peligro de derrumbe hacia el exterior por la acción de algunos árboles que lo estaban presionando. Antes de que hubiese llegado a más, el Ayuntamiento acometió unas obras de restauración con sumo gusto, dejando la parte dañada idéntica a la anterior y de paso eliminado el motivo que le afectó.  Nuestra enhorabuena.
            Ahora cambiamos de escenario y nos trasladamos al Hospital de Santiago. Todos los ubetenses estamos viendo y siguiendo -desde antes de la feria- cómo se están acometiendo obras en el entorno de este magno edificio, unas obras que posiblemente ya estuviesen programadas por otro equipo de gobierno. Pero vamos a lo que nos concierne. Pensamos y estamos convencidos, que con esta intervención el monumento ganará en todos los aspectos: por convertir la parte delantera en semipeatonal, ensanchar el acerado lateral y dejar expedita de contaminación visual su fachada con la desaparición de media docena de aligustres. De esta manera el edifico habrá ganado en majestuosidad, se podrá disfrutar mejor de su belleza y contemplar sin obstáculos que lo impidan toda su hermosa fachada. Esta es otra felicitación más que hacemos llegar desde aquí a los mandatarios munícipes.
Del mismo modo aplaudimos la decisión de sustituir las deterioradas placas metálicas de algunas las calles por otras nuevas de cerámica. Posiblemente ya estuvieran realizadas con anterioridad aunque no fueron colocadas.             
Como se ha podido comprobar, con este escrito hemos querido unirnos al deseo común de todos para las fechas que se nos avecinan. Y queríamos hacerlo extensivo a nuestros gobernantes por éstas y algunas otras intervenciones que consideramos acertadas, por ello tienen nuestro reconocimiento y felicitación.
            Y así lo vamos a dejar, porque en estos días debe reinar la PAZ, el AMOR y la SALUD. En esta entrega hemos hecho dado una cal y la próxima daremos la de arena, pero eso ya lo dejamos para otro año. FELIZ NAVIDAD Y FELIZ AÑO NUEVO. 

Intervenciones en torno al Hospital de Santiago

Nueva placa de cerármica


viernes, 9 de diciembre de 2016

CABAÑUELAS 2017. SEMANA SANTA SIN AGUA

Cabañuelas para el primer cuatrimestre de 2017

El cabañuelista ubetense Alfonso Medina "El Piti" ha publicado ya su previsión del tiempo para los cuatro primeros meses del año. Del mismo entresacamos lo más destacado, como que serán unos meses con poca pluviometría, que sus temperaturas no serán excesivamente bajas por lo que no veremos la nieve y que en Semana Santa no lloverá, salvo el Domingo de Resurrección que cambiará el tiempo. Todo esto hablando de Úbeda y su demarcación. Por último hace hincapié en que entre el día 20 y 22 de enero hay gran probabilidad de que escuchemos un terremoto. Ojalá se equivoque en esta última predicción. 

martes, 29 de noviembre de 2016

CABALLEROS "VEINTICUATRO". MANIFIESTO 2016

La maleza impide ver el bosque

En la tarde del pasado viernes 18 de noviembre, nuestro colectivo llevó a cabo su reivindicación anual como suele ser costumbre por esta época del año. Para esta ocasión elegimos dos escenarios: uno en el campo y el otro en la ciudad. En el primero plantamos un árbol al que bautizamos con el nombre de Cervantes, todo un guiño a la efeméride que este año se celebra en torno a este universal escritor. El segundo espacio estuvo en el casco antiguo, en un precioso rincón junto a las centenarias piedras de la muralla.

MANIFIESTO

Por nuestras continuas manifestaciones, es obvio que en los “Veinticuatro” prima más la defensa por las nobles piedras, que por el arbolado desmesurado y mal ubicado que contamina la visión de éstas. Pero no se equivoquen con nuestra postura, porque somos defensores a ultranza de la naturaleza. Por ello este año hemos querido comenzar nuestra reivindicación anual con un gesto, la plantación de un árbol. Es un arce real del que, en otros siglos, su madera servía para fabricar las mejores lanzas y picas.
Ahora nos encontramos en un mítico lugar de la ciudad, muy cerca de donde San Juan de la Cruz pasó sus últimos días. Estamos a los pies de la muralla colindante a la Puerta del Losal. En el espacio que ocupó el huerto de los PP. Carmelitas Descalzos, hoy convertido en parque urbano para el disfrute de propios y extraños; un espacio que rezuma tranquilidad e invita al descanso sosegado.
Pero el “Huerto del Carmen” está a falta de cuidados en su mantenimiento y conservación. Véanse las oquedades en las piedras de los bajos de la muralla, con el consiguiente riesgo que ello conlleva; las filtraciones de las aguas en sus vetustos sillares; las hierbas en ella adheridas; la desmadrada vegetación y la escasa limpieza del recinto, es lo que nos ha llevado a dar un toque de atención a los responsables de su supervivencia y a hacer patente y visible la protesta anual de este colectivo.
Bien es cierto que últimamente hemos observado que se le ha tenido alguna dedicación, pero no es suficiente. Aunque hay algunos tramos que nos enorgullecen, también hay otros que nos avergüenzan. Por ello pedimos para este parque más cuidado, más mimo y más atención.
Dado a 18 de noviembre de 2016. Tal día como hoy de hace 228 años, nació Daguerre, padre de la fotografía junto a Niépce.

Plantación del árbol

Lectura del manifiesto


Agradecemos la colaboración de:
Lorenzo y Aurora Rodríguez Alhambra y Juan Ángel Gómez Cano



viernes, 28 de octubre de 2016

DIEGO DE LOS COBOS. V CENTENARIO DE SU NACIMIENTO

Para los ubetenses, la memoria de Diego de los Cobos y Molina
está más cercana que la de Cervantes o Shakespeare

En este año España y el mundo entero conmemoran una efeméride de gran calado histórico y cultural como es la celebración del IV Centenario de las muertes de Miguel de Cervantes (1547-1616) y William Shakespeare (1582-1616), dos genios de la literatura a nivel mundial.
Para la mayoría de los ubetenses, tal vez quede muy lejana la figura del dramaturgo, poeta y actor inglés. Sin embargo, Cervantes, es más nuestro, más cercano incluso se especula con la posibilidad de que pasara por nuestra ciudad en algún momento de su vida, es por ello por lo que el nombre de Úbeda aparezca en el Quijote en varias ocasiones. A pesar de ello, en nuestra localidad se han llevado a cabo escasísimos actos (exiguos diríamos) para recordar la memoria de ambos personajes con proyección universal.
Pero también en este año se conmemora otro importante aniversario, como lo es el V Centenario del nacimiento de un insigne ubetense, don Diego de los Cobos y Molina (1516-1565), y de éste sí que los ubetenses tenemos más cercana su presencia. Tal vez, en torno a su figura, no nos atraiga tanto el hecho de haber sido obispo de Ávila o de Jaén, sino como por su mecenazgo para llevar a cabo importantes empresas constructoras. Durante sus últimos cuatro años de vida y ya ocupando la silla episcopal de la capital del Santo Reino, favoreció la fundación de los monasterios de Santa Clara y San Ildefonso en Baeza y el de la Concepción en Jaén. Pero sin lugar a dudas su obra más importante fue la que levantó en su tierra natal encomendada al célebre arquitecto de la época Andrés de Vandelvira como lo es el Hospital de Santiago, joya del Renacimiento español y conocida por su traza con el sobrenombre de “El Escorial de Andalucía”. Por cierto, nuestro obispo, al igual que ya lo hacían otros de su tiempo, quiso mirarse en el mismo espejo del cardenal Juan Pardo de Tavera en Toledo y tomó buena nota del hospital que allí estaba construyendo. Don Diego falleció cuando asistía a un concilio provincial -precisamente- en Toledo, siendo sus restos trasladados a Úbeda y enterrados en el convento de la Merced en espera de que se acabara la cripta en la capilla del Hospital de Santiago donde reposan definitivamente. 

Para recordar la memoria de este ilustre ubetense del siglo XVI perteneciente a la nobleza de servicio y con motivo de cumplirse en este 2016 los 500 años de su nacimiento, el Instituto de Estudios Giennenses con su directora al frente Adela Tarifa y en colaboración con el Ayuntamiento de Úbeda  y la asociación Úbeda por la Cultura, han llevado a cabo durante la segunda quincena del mes de octubre un enriquecedor ciclo de conferencias en la sala Julio Corzo del Hospital de Santiago relacionadas con la figura y la obra del “Obispo Covos”, junto a una visita guiada al citado hospital. Los conferenciantes han sido: Pedro Galera Andreu, Adela Tarifa Fernández, Fco. Javier Ruiz Ramos, Francisco Juan Martínez Rojas, José Manuel Almansa Moreno y Arsenio Moreno Mendoza. Nuestro colectivo se ha adherido con su presencia a esta iniciativa, que ha sido respaldada por numeroso público. 

Conferencia de Adela Tarifa




domingo, 2 de octubre de 2016

LA FERIA DE ÚBEDA DE HACE UN SIGLO


En esta ocasión nuestra entrega tiene tintes románticos y menos reivindicativos dados los días de distención en que nos encontramos. 
     Sepan los lectores que los caballeros Heráldico y Mercader están recopilando datos para publicar sendas obras. Una versará sobre los centros educativos en Úbeda a través de los tiempos y la otra sobre la historia del Carnaval ubetense. En ese hojear documentos y periódicos antiguos, se han topado con este programa de feria publicado en las páginas del periódico “Independiente” que precisamente este año cumple un siglo. Como en él aparece información curiosa, aquí queda reproducido para su lectura. Y aprovechando la ocasión, les deseamos a todos los ubetenses que pasen una feliz Feria de San Miguel, incluidos a los políticos.


sábado, 24 de septiembre de 2016

CICLO DE CONFERENCIAS EN EL CLUB DIANA

Juan Ramón Martínez Elvira

A este último ciclo de conferencias que viene realizando el Club Diana en su sede y que tan magistralmente coordina y presenta Antonio del Castillo Vico, los Caballeros 24 han asistido para empaparse de la sabiduría que en este salón se desborda. Ayer asistimos a la conferencia que nuestro amigo historiador y ubetense predilecto impartió sobre "Las Fiestas de los Toros en Úbeda desde el siglo XV hasta 1846". Esta charla fue patrocinada por el Ayuntamiento dado que es su intención cada año publicar este tipo de trabajos relacionados con la feria de Úbeda, al menos así lo manifestó el concejal de Cultura y Fiestas, Jerónimo García allí presente.

Más de medio centenar de personas acudieron a la charla

"Doce" de los caballeros con el conferenciante y los dirigentes
del Club Diana, entre ellos su presidente Adolfo Vivancos

Del mismo modo y a comienzos de este mes de septiembre, nuestro compañero de armas el Caballero Alquimista, Agustín Palacios Martínez, ofreció otra charla abordando en el tema de Úbeda durante los años de la guerra civil, extraída de un extenso trabajo que tiene bien documentado. 

Agustín Palacios Martínez durante su charla

Aspecto que ofrecía el salón



domingo, 4 de septiembre de 2016

VESTIGIOS DE LA IGLESIA DE SAN JUAN EVANGELISTA O “SAN JUAN DE LOS HUERTOS”

Hexapétala o rosácea

Los restos diseminados de un templo románico del siglo XIII

Aprovechando una mañana soleada de un domingo ya pasado, unos cuantos caballeros hicimos un breve recorrido por las huertas que aún subsisten a las faldas de las murallas de Úbeda. Aparte de disfrutar entre ellas y comprobar cómo permanecen en activo varias de estas explotaciones desde hace ya bastantes siglos, también pudimos comprobar cómo diseminadas por ellas aparecen vestigios de lo que en otro tiempo fuera la iglesia parroquial de San Juan Evangelista.
     Según nos dice Ginés Torres Navarrete en su historia, el templo era pequeño, labrado en piedra y de estilo románico, cuyas dimensiones eran de diez metros de largo por seis de ancho. Se alzó muy próximo a la muralla del Alcázar y frente a la fuente de la Saludeja. Fue extinguido como parroquia en el año 1740, anexionándose al cercano San Lorenzo. A pesar de ello la iglesia continuó realizando oficios y algunos cultos hasta bien entrado el siguiente siglo. Poco a poco cayó en al abandono e hizo que entrara en ruina y sus piedras quedaron esparcidas por el suelo sirviendo para otros usos, nunca para ser repuestas ni restauradas.
      En las inmediaciones y huertas colindantes, aún quedan restos diseminados de su presencia. Hasta hace poco (1982), junto a la puerta de una de estas edificaciones rurales, había un santo de piedra que le dio nombre (la Huerta del Santo). Otras piezas de su fábrica sirven o han servido, como material para muros o canalizaciones, e incluso de asientos o escalones. Como echándole un pulso al tiempo, todavía se levanta erguido un lienzo de muro de su ábside, al que habría que conservar a toda costa. En el recorrido llamó nuestra atención una piedra que sirve de escalinata donde aparece labrado un símbolo cuyo origen y representación desconocíamos. Nos pusimos en contacto con el catedrático y erudito en la materia Jesús López Román para que nos arrojara luz sobre dicho anagrama y esta fue su respuesta:
     Queridos amigos: El símbolo en cuestión es la hexapétala o rosácea de seis pétalos cuya interpretación expongo, con detalle, en las páginas 343-350 de mi libro. La que figura en la fotografía que me habéis enviado corresponde a la época medieval (siglo XIII, con gran margen de probabilidad) y hace referencia directa a Cristo por el círculo en el que está inscrita y por los rayos de gloria que la circundan. El origen de este símbolo es antiquísimo (Tradición Primordial, según Guénon). Se encuentra, además, en la cultura griega (finales del período clásico) y está muy difundido en la civilización romana. El Cristianismo lo adoptó en época muy temprana; se encuentra en estelas y lápidas funerarias y en iglesias visigodas y prerrománicas. En el arte románico y gótico su presencia es casi una constante para representar a Cristo como Centro del mundo y Alfa y Omega (Principio y Fin de todo lo creado).
     A esto sólo nos queda añadir que, si la piedra en cuestión pertenece a la iglesia de San Juan Evangelista, probablemente estemos ante un templo que se construyó a finales del siglo XIII o a lo sumo comienzos del XIV. Porque, según Ruiz Prieto, esta zona de la ciudad, junto a la de San Juan Bautista (próxima a San Millán) fueron las primeras en ser repobladas tras la conquista en 1233.  

Gárgola surtiendo agua a una alberca

Piedras de cantería en una modesta edificación

Restos de un arco o puerta

Restos de columnas

Curioso cerrojo

Labrados bloques de piedra

sábado, 27 de agosto de 2016

CABAÑUELAS 2016-2017 POR ALFONSO MEDINA "EL PITI" DE ÚBEDA


Hace unos días que nuestro amigo el PITI nos facilitó el pronóstico del tiempo para lo que queda de año y los meses siguientes del entrante. Como es costumbre, siempre lo fracciona por cuatrimestres y ahí va el que corresponde al tercero del año 2016. Lo más destacado es la lluvia de noviembre, porque los otros tres meses no espera casi nada de precipitaciones y con las temperaturas más altas de lo normal. Lo que sí adelantaremos para el mes de enero es la posibilidad de un terremoto a mediados. Ya nos irá contando.    

sábado, 20 de agosto de 2016

PRÓXIMA EXPOSICIÓN DE JUANAN SORIA EN GANTE


"El único sentido del olvido es la negación. Juanan Soria establece un diálogo con el tiempo a partir de los fragmentos de obras destruidas y símbolos condenados al ostracismo. Su obra recupera la memoria y hace del proceso un fin en sí mismo. El proceso como proceso. Destruir para construir. Resistencia y lucha para entender el pasado, para entender el viaje, para entendernos hoy. Con todo lo que ello supone". 


Cecilia Jaime Gallery (Gante), Inauguración, 3 de septiembre de 2016.  

viernes, 29 de julio de 2016

LA HUELLA DEL CHICLE ES ALARGADA


Hay quienes tienen muy poca conciencia y exclaman:

¡Para eso están los barrenderos!

En Úbeda, desde el Hospital de Santiago, siguiendo por la Calle Nueva, Mesones, hasta la Plaza Vieja y más allá, la huella del chicle es indeleble y continua. Es como una guía -en otras ciudades son líneas de colores- que nos conducen hacia nuestro Centro Histórico. Una guía de negros lunares que afean nuestras calles y dicen muy poco en favor de los que habitamos nuestra bella ciudad: LA SUCIEDAD DE LAS CIUDADES DEGRADAN A SUS CIUDADANOS.

Pero no es una señal indicativa propia de la normativa de las CIUDADES PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD, sino la consecuencia de la poca educación de quienes, cansados de mascar, tiran el consabido chicle al suelo sin tener el pequeño gesto de buscar una papelera. Es la prueba palpable de la falta de urbanidad de quienes, con una naturalidad rayana en la inconsciencia, contribuyen a presentar una imagen de la ciudad que en nada nos beneficia. Son estas manchas tan pertinaces, que cada vez que se les somete a una operación de limpieza -por cierto, costosa operación- aparecen nuevamente como un Guadiana resucitado. Es evidente que lo que  vuelve a aparecer es la falta de urbanidad, de civismo y respeto de los que en poco estiman la limpieza e higiene de la ciudad. Hay quienes tienen muy poca conciencia y exclaman: ¡Para eso están los barrenderos!

No somos los primeros en hablar de la limpieza de Úbeda ni es la primera vez que se trata el tema, pero pensamos que no viene mal que, de vez en cuando, nos demos un toque de atención y nos apliquemos en la tarea de mantener una ciudad digna y limpia que eso también entra dentro del título PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD.

        Pidamos a nuestros munícipes y autoridades que cumplan con el deber de mantenimiento y vigilancia de la ciudad que les corresponde, pero tampoco abdiquemos de nuestras obligaciones de buenos ciudadanos por la defensa de una Úbeda limpia, para el disfrute nuestro y el del visitante.

jueves, 30 de junio de 2016

ADELA TARIFA, NUEVA DIRECTORA DEL INSTITUTO DE ESTUDIOS GIENENSES


La Doctora en Historia Adela Tarifa Fernández,
estará al frente de esta institución durante los próximos ocho años

En la tarde del jueves 2 de junio de 2016  y en la desacralizada capilla del convento de San Juan de Dios de la capital jienense, tuvo lugar la toma de posesión de la nueva consejera directora del Instituto de Estudios Giennenses “IEG”, doña Adela Tarifa Fernández, convirtiéndose de esta manera en la primera mujer al frente de dicho centro documental en los 65 años que tiene de historia. La mesa estuvo presidida por el presidente de la Diputación y del IEG, Francisco Reyes, contando con la presencia del anterior responsable académico de este organismo autónomo de la Administración provincial, Pedro Galera y de la nueva electa Adela Tarifa.
En la sala estuvieron presentes, entre otros: el diputado de Cultura y Deportes, la alcaldesa de Úbeda, numerosos consejeros del instituto, personajes de la cultura de Úbeda y de Jaén y por supuesto, los Caballeros Veinticuatro que, con su presencia, quisieron dar el mayor respaldo a esta ubetense de convicción.
Adela es desde 1998 consejera del citado instituto y lleva 8 años ocupando el cargo de vicedirectora y en estos años ha aportado mucho a la institución, así lo reconocieron, tanto Francisco Reyes, como Pedro Galera en sus intervenciones. También esperaban en estos próximos años de su mandato se alcancen otras metas que, en boca de Adela, se convirtió en todo un programa de proyectos y actuaciones dignas de la mejora directora y eficiente gestora.
El IEG alberga ahora mismo unos 100.000 títulos, 800.000 imágenes, un millar de mapas y unos 600 títulos de publicaciones periódicas que se pueden consultar desde cualquier lugar del mundo y en cualquier momento.
Tras la intervención de los tres que ocupaban la mesa presidencial, se le hizo entrega a Adela -por parte del Instituto- de un libro de considerado tamaño. Del mismo modo, también recibió un ramo de flores de la comisión encargada de los actos para conmemorar el 250 Aniversario de las Nuevas Poblaciones de la que ella es miembro activo.
Los plácemes y enhorabuenas por parte de los asistentes a la nueva directora fueron muy emotivos para ella y así lo manifestó. Y fue ella la que quiso hacerse una fotografía de recuerdo “Con los amigos que habían venido de Úbeda”.
Al finalizar, cuatro caballeros junto con el archivero Ramón Beltrán, quisimos celebrar la toma, tomándonos una copa en un lugar con rancio tipismo y excelentes viandas llamado La Tasca de Los Amigos.

Adela con algunos amigos que habían ido desde Úbeda

En la tasca Los Amigos



martes, 31 de mayo de 2016

SOBRE LA VEGETACIÓN DEL HUERTO DEL CARMEN Y ALEDAÑOS

Aspecto muy favorable

No escondamos nuestro rico patrimonio tras la maleza

Hacía ya unos meses que nuestros pasos no emprendían la ruta desde que va desde la Cruz de Hierro pasando por la Fuente Seca, el Huerto del Carmen y desembocado en la Plaza de Santa Lucía. Nuestros pies y algunos años encima, prefieren las calzadas llanas a los empedrados y cuestas.

Fue una mañana soleada de este extraño invierno primaveral. Al llegar a la altura del Huerto del Carmen, el sol calentaba las vetustas piedras de la muralla. Nos fijamos que la experta y atinada mano del podador, había aligerado los árboles y arbustos que conforman el jardín del huerto para que sus ramas sobrantes retoñen en primavera. Se aprecia una extraña claridad, se observa mejor la monumental muralla en su comienzo. Sin embargo y más allá, bajo la cúpula de la iglesia de San Miguel, han crecido tanto los cipreses y los árboles de gran porte, que sólo se ve vegetación y maleza por doquier. Pasado el pilar de la fuente –que por cierto está un tanto olvidado en cuanto a su limpieza-, se aprecia en todo su esplendor el lienzo de adarve que conecta con la puerta de Santa Lucia y que no hace mucho fue restaurado y consolidado. Éste se encuentra libre de sombras, sólo unos arbustos que, a sus pies, sirven para contener y fijar la tierra del terraplencillo.

Este colectivo, ve con buenos ojos que dicho trozo de muralla siga sin “aditivos”, tal como está. Pedimos por tanto, a los responsables como los encargados de jardinería y urbanismo de nuestro Ayuntamiento, que continúen así y que el resto de la fortificación que esta medio oculta esta parte quede -tras una exhaustiva poda- bien visible para el disfrute de lugareños y visitantes.


No debemos olvidar que cuando un turista se desplaza a una localidad su motivo principal consiste en contemplar los edificios, monumentos y sus piedras centenarias (aparte de visitar algunos museos y degustar su gastronomía) y no fijar su atención en mirar los álamos, los cipreses o los laureles. No escondamos nuestro rico patrimonio tras la maleza. Es nuestra opinión. 

Aspecto lamentable

Fotografías del caballero Atanaor

lunes, 2 de mayo de 2016

DEL ESCORIAL DE ANDALUCÍA A SAN LORENZO DEL LAUREL

Fotomontaje

Lean lo que nos hemos encontrado en las Actas del Cabildo ubetense con fecha 2 de febrero de 1885 (libro 86, folio 11), donde el concejo aprobó “la corta de los árboles que existen en la lonja del Hospital de Santiago”, pues alegaban que “sus raíces eran altamente perjudiciales para la conservación del edificio”. Está claro que las raíces de antes eran mucho más peligrosas que las de ahora.  
Nosotros, los “Veinticuatro”, no queremos continuar “erre que erre” sobre UN TEMA QUE YA TENEMOS ZANJADO, como es nuestro deseo de que el magnífico y monumental laurel que se alza ante la fachada del Hospital de Santiago fuese trasplantado a otro lugar (que se puede) y dejara diáfana -para que luciera en su plenitud- la obra más señera de nuestro arquitecto del Renacimiento Andrés de Vandelvira. 
Durante nuestra campaña en la que pedíamos su traslado hubo alguien que alzó su voz diciendo que si se intentaba quitar el laurel de ahí se ataría al mismo con cadenas. Y hasta hubo quienes nos tacharon de arboricidas. Nada más lejos de la realidad, porque nuestra intención siempre ha sido la de mantener vivo este árbol que llama la atención por su porte y frondosidad, eso sí, en otro lugar, como podría ser el Parque Norte o en los jardines románticos que hay en la parte trasera de este mismo edificio.   
Cuando se hicieron los jardines que hoy existen en la lonja del Hospital, se plantaron varios árboles (entre los que iban laureles) a cada lado y en la parte central de cada jardinillo flanqueados por arbustos y adelfas. Todo ello poco a poco se fue haciendo desaparecer y con buen criterio, sin embargo uno de los laureles fue mimado llegando a echar profundas raíces que lo han mantenido con excelente salud hasta nuestros días. Demos gracias a Dios que al técnico que se le ocurrió tan genial idea no plantó ficus como los de la Alameda de Málaga.
Se comenta por ahí que los encargados de la conservación y jardinería de San Lorenzo del Escorial quieren importar la idea que algunos acogen con tanto cariño aquí y plantar en la explanada del magno monumento que alzara Felipe II unos cuantos laureles y así solidarizarse con el “Escorial de Andalucía” para lo que también cambiarían su nombre denominándolo “San Lorenzo del Laurel”.
Esta llamada nuestra sólo quiere alzar la voz para que cuando se plante un árbol se piense el impacto visual o el daño que puede hacer cuando éste crezca, como le ocurrirá a los cuatro cipreses plantados recientemente flanqueando el monumento de Juan de la Cruz. 


Nota.- Las torres serán el tema para otro artículo.  

martes, 19 de abril de 2016

LA MOTILLA DEL AZUER VISITADA POR LOS "VEINTICUATRO"


El martes 5 de abril, 5 de los Caballeros se reunieron para emprender una aventura por tierras del reino de Castilla la Nueva. A las 7:30 de la mañana, hora de la cita, la climatología se presentaba adversa y a punto estuvo la lluvia de hacer que abortáramos la empresa. Bien es cierto que el arrojo de los caballeros, sobre todo de los más experimentados, hizo que se llevara para adelante lo programado. Tras reponer fuerzas para la jornada con un buen almuerzo de churros con chocolate, partió la expedición –en el carruaje del Mercader- desde la Ciudad de Los Cerros del reino de Jaén hacia la villa de Daimiel perteneciente a la jurisdicción de la Ciudad Real.  Durante todo el camino nos acompañó la lluvia que luego –al llegar al destino- desapareció y no hizo acto de presencia en toda la jornada.
El primer lugar nos presentamos en el Museo Comarcal que era el punto de encuentro. Tras recorrer sus varias salas en las que se muestra al visitante su historia, estando entre las cosas de interés una amplia colección de cerámica procedente de muchos puntos de España.
Mientras que se aproximaba la hora de iniciar la excursión principal a la Motilla del Azuer, visitamos brevemente la iglesia de San Pedro del s. XVI. Como curiosidad, que proviene de siglos atrás, debemos decir que esta villa tiene su división eclesial en dos parroquias y los bautizados en ésta se les denominan con el mote de “borregos” y los que lo están en Santa María (que es la más antigua) con el de “chuchos”.
De regreso al museo y en los sótanos, un guía nos hizo una introducción sobre lo que íbamos a ver. El siguiente guía nos invitó para que le acompañásemos hasta el Land Rover que nos llevaría al yacimiento arqueológico que se encontraba a unos kilómetros del núcleo urbano. Conforme íbamos adentrándonos en la entrañas de aquella milenaria edificación concéntrica
con carácter defensivo, íbamos descubriendo este curioso lugar de la edad del bronce donde se han descubierto que aquí se efectuaba y se controlaba una cierta actividad económica. Llama especialmente la atención el singular espacio donde se encuentra el pozo y según el guía corresponde al sistema hidráulico más antiguo de la península. Todo en la jornada y en la visita acompañó, incluso el frió, que se hizo más patente durante la estancia en el yacimiento...








Estas son algunas imágenes de la visita a la Motilla. Luego tuvimos tiempo de recorrer la villa de Daimiel y degustar sus platos típicos.  

martes, 29 de marzo de 2016

DESAPARECE ALMACENES MARTÍN

La última plantilla de Almacenes Martín. 9-3-2016

Tras más de medio siglo de existencia,
cierra sus puertas este señero comercio ubetense

La implicación de nuestro colectivo está -principalmente- en la defensa del patrimonio monumental y casi siempre de murallas para adentro, aunque bien es cierto que en algunas ocasiones hemos hecho alguna que otra incursión por las zonas de extramuros.  El tema que hoy vamos a abordar no tiene como base nuestras piedras centenarias, sin embargo sí que forma o ha formado parte de nuestro patrimonio. Porque Úbeda, aparte de ser monumental, también lo es comercial y ese tejido industrial que nos ha distinguido y ha hecho que Úbeda sea un referente comercial en la provincia, también forma parte de nuestro particular patrimonio. Y desgraciadamente, con el paso de los años, las nuevas corrientes, la irrupción de voraces mercados, la globalización del sector centralizado en franquicias y la prolongada crisis, ha llevado al comercio tradicional, al de toda la vida, al que se ha trasmitido de padres a hijos, a su desaparición en unos cuantos años para acá.

El pasado 9 de marzo cerraba sus puertas para siempre una firma que ha sido el santo y seña del comercio local y provincial como era ALMACENES MARTIN. Su centro de la calle Obispo Cobos (Nueva) y los dos centros Habitacle (Jaén y Úbeda) ya forman parte de la historia y se unen en la memoria colectiva con otras firmas de gran relevancia que desaparecieron en su día como lo fueron las fundiciones de FUENTES CARDONA o de PALACÍN, los talleres COSTÁN, la constructora COFIANSA, sin olvidar otras menores pero de gran calado en la ciudadanía como ELECTRORESA, GÁFICAS BELLÓN, MAÑOSA, ALMACENES CENTRALES, ARSENIO JIMÉNEZ, etc. 

Almacenes Martín nació en 1960 de la mano de Sebastián Villar Arroyo como una sucursal o prolongación de Almacenes El Métrico bajo la titularidad de Martín Villar Vizcaíno, su hijo. Lo hizo en la calle Real (José Antonio) con la adquisición de una tienda que era propiedad de Bellón, el de la imprenta. Allí ya se verificaba la venta al detall y al mayor, junto con dos negocios más en la capital jienense. Dichos establecimientos fueron creciendo y a finales de esta década llegaron a la calle Mesones y al Pasaje de San Isidoro. Posteriormente amplió sus dependencias a la calle Obispo Cobos y de allí a una nave situada en la carretera Córdoba-Valencia Km. 149. En estas décadas de existencia, si algún negocio de la saga se cerraba era para abrir otro con más posibilidades. De este modo la firma llegó a convertirse en Mediana Empresa con más de 50 trabajadores y junto a la nómina de su filiar El Métrico, se convirtieron en los comercios más importantes de la provincia tanto en el montante comercial como en el personal, de hecho, aquí en Úbeda se llegaron a firmar durante muchos años los convenios colectivos provinciales del comercio textil.

Hoy ya no vale buscar culpables del porqué se ha llegado a esta situación. Es cierto que en la mayoría de las ocasiones se viene dando esa máxima de que los grandes negocios familiares sólo se mantienen tres generaciones; ni es del todo cierto ni es del todo falso. Como decía el poeta “Todo pasa y todo queda”.

Almacenes Martín ha sido el último en engrosar la lista de nostálgicos comercios locales del ramo -con marchamo ubetense- que coexistieron en algún momento de su historia como los recordados: Almacenes el Pasaje, Tejidos Sola, Galerías Tuñón, Hermanos Moreno, Tejidos Blanca, Confecciones Paquinés, Mercería Villar, Vda. de Fuentes, Confecciones Berlanga, Galerías Niza, Confecciones Rodríguez, Fashion Boutique, etc.

Desde nuestro colectivo queremos solidarizarnos con esta familia de empresarios que con sus aciertos y desaciertos han dado trabajo a muchos ubetenses. Sin embargo el mayor reconocimiento va por el más del centenar de empleados que durante estos 56 años de historia han dado lo mejor de sí para con su empresa como trabajadores del comercio local. Y cómo no, a nuestro compañero de armas, el caballero Mercader. Como dato curioso, sobre todo por el número que camina paralelo a la vida de éste último, apuntaremos que la nómina de los últimos empleados estaba compuesta por 13 trabajadores.
     
Fachada de un antiguo establecimiento en la calle Mesones. 1989


Inauguración de un almacén en la calle Nueva. 1984

Fotos JASA

sábado, 27 de febrero de 2016

VÍCTOR PARA SAN LORENZO Y S.O.S PARA SAN BARTOLÓMÉ

Antonio, Manuel y Nicolás, 
fundadores de la Huerta de San Antonio

Los Caballeros Veinticuatro hemos visitado varias veces la iglesia de San Lorenzo y su “apertura por obras” y cada vez nos marchamos de allí más satisfechos.
En primer lugar porque vemos cómo poco a poco se va materializando el ambicioso proyecto que consistía prioritariamente en las obras de consolidación del edificio y posteriormente en su restauración, rescatar la historia que se esconde en sus entrañas con intervenciones arqueológicas y por supuesto el último trabajo que ha constituido en abrir la cegada puerta trasera que da a un pequeño cementerio, abriendo el muro perimetral y colocando una reja de forja ubetense. En segundo lugar por comprobar cómo sólo tres personas, los hermanos Antonio, Manuel y Nicolás Berlanga Martínez -apoyados por el obispado- están realizando una magnífica puesta en valor de este monumento nacional que deja a todo aquel que lo visita orgulloso de tenerlos por ubetenses comprometidos con su tierra, pues hasta ahora son los únicos en la historia de nuestra población que están haciendo este bellísimo y denodado gesto con nuestro maltratado patrimonio.

La verdad es que a nosotros nos agradaría infinito que hubiera más mecenas de éstos o por lo menos alguno o algunos que siguieran ese mismo ejemplo e intervinieran en algunos edificios históricos más. Por ejemplo reconstruir la techumbre de la preciosa y singular ermita de San Bartolomé, pues tiene todos sus muros en perfecto estado y sólo le falta la cubierta. Sería una triste pena que desapareciera este edificio que fue reconstruido en los años 20 del s. XVIII, que fue parroquia durante un siglo y que sus raíces se remontan a la Reconquista y posiblemente mucho más atrás.    

Portada descubierta de San Lorenzo

Ermita de San Bartolomé

jueves, 11 de febrero de 2016

LAS ROTONDAS Y PÓRTICOS DEL PATRIMONIO

Entrada a Úbeda por la barriada Puerta del Sol

Para cualquier visitante que recale en nuestra ciudad, lo primero que percibirá en su retina serán las puertas de entrada a este “patrimonial lugar” a modo de tarjeta de presentación, como lo son las rotondas, y en las entradas a Úbeda hay siete.
Si los turistas nos llegan por el poniente, desde Baeza o Jaén, encontrarán un par de glorietas dejadas de la mano de Dios. Si lo hacen por los caminos que llegan de Linares o Bailén, su primera rotonda está en obras “todavía”. Si nos visitan desde el norte, por las vías procedentes de Madrid o La Carolina, la primera rotonda que encontrarán parece que está demarcada en mitad del campo, nunca mejor dicho. Y si su entrada es por el este, acceso desde la villa de Sabiote, se encontrarán una primera rotonda totalmente desangelada. En los accesos desde el antiguo Levante hispano y del Sur, entrada desde Granada, no encontrarán rotondas porque no las hay, pero sí le daremos la bienvenida con unas cunetas adornadas y atestadas de abundante maleza erguida y mustia y con basura de todo tipo, principalmente inorgánica.
Bien es cierto que en los días navideños, las rotondas mejor acondicionadas de las descritas (que son dos), han estado muy bien engalanadas, pero las rotondas olvidadas (que son cinco), continuaban de la misma guisa.
A los que tenemos la sana costumbre de hacer turismo por nuestra piel de toro, se nos ponen los dientes largos cuando comprobamos las bellas rotondas y glorietas que hay a la entrada de muchos municipios, sean grandes o más pequeños.

Desconocemos a qué ente, ya sea Diputación Provincial, Junta de Andalucía, Ministerio o el mismísimo Ayuntamiento, corresponda su adecentamiento, pero lo que no cabe duda es que nuestros regidores serán los primeros que tienen que ponerse manos a la obra o en su defecto alzar la voz en los despachos correspondientes para que nuestra primera imagen, en definitiva nuestra cara al exterior, sea el espejo que refleje el interior del alma patrimonial. 
Para cualquier visitante que recale en nuestra ciudad, lo primero que percibirá en su retina serán las puertas de entrada a este “patrimonial lugar” a modo de tarjeta de presentación, como lo son las rotondas, y en las entradas a Úbeda hay siete.
Si los turistas nos llegan por el poniente, desde Baeza o Jaén, encontrarán un par de glorietas dejadas de la mano de Dios. Si lo hacen por los caminos que llegan de Linares o Bailén, su primera rotonda está en obras “todavía”. Si nos visitan desde el norte, por las vías procedentes de Madrid o La Carolina, la primera rotonda que encontrarán parece que está demarcada en mitad del campo, nunca mejor dicho. Y si su entrada es por el este, acceso desde la villa de Sabiote, se encontrarán una primera rotonda totalmente desangelada. En los accesos desde el antiguo Levante hispano y del Sur, entrada desde Granada, no encontrarán rotondas porque no las hay, pero sí le daremos la bienvenida con unas cunetas adornadas y atestadas de abundante maleza erguida y mustia y con basura de todo tipo, principalmente inorgánica.
Bien es cierto que en los días navideños, las rotondas mejor acondicionadas de las descritas (que son dos), han estado muy bien engalanadas, pero las rotondas olvidadas (que son cinco), continuaban de la misma guisa.
A los que tenemos la sana costumbre de hacer turismo por nuestra piel de toro, se nos ponen los dientes largos cuando comprobamos las bellas rotondas y glorietas que hay a la entrada de muchos municipios, sean grandes o más pequeños.
Desconocemos a qué ente, ya sea Diputación Provincial, Junta de Andalucía, Ministerio o el mismísimo Ayuntamiento, corresponda su adecentamiento, pero lo que no cabe duda es que nuestros regidores serán los primeros que tienen que ponerse manos a la obra o en su defecto alzar la voz en los despachos correspondientes para que nuestra primera imagen, en definitiva nuestra cara al exterior, sea el espejo que refleje el interior del alma patrimonial.

 
Basura por la Ronda Antonio Muñoz Molina

Glorieta casi abandonada por la entrada desde La Carolina

 
Inmediaciones de la Ronda Muñoz Molina